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Enrique López Carrasco nació en 1929 en Villamalea y desde los 12 años trabajó como campesino. Durante los años 50 comenzó a crear un núcleo con gente de su edad, que sería posteriormente la base orgánica del PCE local. De esta manera, apareció una nueva generación de militantes que no habían participado en la Guerra Civil y que llevaban a cabo la política de aprovechamiento de los cauces legales, combinándola con las formas ilegales de lucha. Después de crear el primer núcleo comunista en Villamalea, se les unieron antiguos militantes del PCE, del Frente Popular y republicanos, creando un foco de resistencia antifranquista. Enrique López Carrasco fue elegido en 1959 vocal de la cooperativa san Antonio Abad, pero fue vetado por la Organización Sindical para el cargo de secretario en 1960, por “ser revolucionario, ateo, enemigo del régimen y amigo de expresidiarios condenados a la última pena”.

En 1961 es finalmente elegido democráticamente presidente de la Cooperativa San Antonio Abad, cargo que ocupó durante 16 años consecutivos. Un informe del Partido Comunista decía con respecto a su papel en la cooperativa de Villamalea que “el alma de todo este trabajo” fue Enrique López Carrasco, “presidente de la Cooperativa, presidente de la Hermandad, presidente de la Caja Rural y miembro de unas cuantas comisiones y organismos provinciales”. Benito Sanz Días describe a Enrique López Carrasco como el líder campesino con más prestigio e influencia en La Mancha. Lo cierto es que desempeñó un papel fundamental en la creación del movimiento campesino desde los años 50 a los 70.

Además su importancia trasciende lo meramente local, Enrique López Carrasco fue llamado a París por su partido y pasó a pertenecer al Comité Central en el exterior, visitó la URSS y otros países socialistas invitado por los sindicatos soviéticos. Participó en el VIII Congreso e intervino en 1975 como representante del PCE en la reunión de los partidos comunistas de la Europa capitalista sobre los problemas del campo. Tras la conferencia del PCE en Roma en 1976, Enrique López Carrasco declaró a la prensa de Albacete su pertenencia al Comité Central del Partido Comunista, del que fue el principal impulsor en nuestra provincia.

Bibliografía

MARTÍN GARCÍA, O., A tientas con la democracia. Movilización, actitudes y cambio en la provincia de Albacete, 1966-1977, Madrid: La Catarata, 2008, pp. 81-94.

MOLINA GARCÍA, S., La Transición que no fue. Los Proyectos Revolucionarios y Franquistas en la provincia de Albacete, 1975-1982, Albacete: Instituto de Estudios Albacetenses, 2017, pp. 95-101.

SANZ DÍAZ, B., “Historia de la cooperativa San Antonio Abad de Villamalea (Albacete). (1946-1997)”, en Al-Basit: Revista de estudios albacetenses, nº 7, 1980, pp. 113-148.

SANZ DÍAZ, B., “Villamalea 1976. El año de la transición política. Memoria gráfica de un pueblo de Castilla-La Mancha”, 2013.

Palabras clave

Partido Comunista, PCE, Villamalea, Cooperativa San Antonio Abad, Enrique López Carrasco, Comité Central del PCE, pueblo rojo

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